Un debate que no lo es

Del debate de hoy entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Rajoy lo que más me sorprende es el aplauso de los medios de comunicación. Nunca entenderé porqué celebramos un espectáculo pactado en el que ni hay intercambio de ideas ni contraste de pareceres (los equipos de ambos candidatos así lo han pactado) ni tampoco, por supuesto, asomo de periodismo (son los partidos los que marcan el temario y el ritmo). Somos una sociedad tan papanatas que copiamos formalmente los debates pero no nos molestamos en prestar atención a su estructura. Y después (atentos) aún dedicaremos espacio a quejarnos amarga y sesudamente porque el resultado no ha estado a la altura de lo que esperábamos.